A veces creo que me encuentro en el límite entre la normalidad y la conducta obsesiva-compulsiva.
Hay en mi vida una gran encrucijada relacionada con los medios de transporte: nunca sé si prefiero caminar más o tardar menos.
Como ya expuse en un caso particular en el blog, hay veces que caminando más, tardás menos.
Hoy me encontré en una situación parecida:
Vuelvo del CBC en el 133. Y tengo dos opciones:
· Me bajo y camino siete cuadras hasta mi casa.
· Me bajo más tarde, el colectivo da una vuelta y me deja a cuatro cuadras de mi casa.
Hoy elegí la segunda opción y decidí cronometrar el tiempo. Puse en marcha el cronómetro del celular en el preciso instante en que el colectivo paraba en la opción uno, y lo detuve cuando llegué a mi casa.
Tardé nueve minutos, veintinueve segundos, catorce centésimas.
Creo que en la otra opción hago más rápido. Me pondré a prueba esta semana.
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2 comentarios:
Lo mismo he sospechado, pero nunca me he tomado la curiosidad de cronometrarlo.
Me has dado una excelente idea.
Me agrada tu blog. Te sigo.
Saludos.
Buenas! Paso por primera vez por acá.
A mi me pasa que cuando alguien se baja del bondi y veo que está caminando más rápido que lo que avanza el colectivo es cuando pienso "estoy perdiendo mi vida arriba de este bicho lleno de gente!" xD
Por cierto, muy copado el título de tu blog, por las imágenes de las pelis (sobre todo por "citizen kane", mi favorita, jaja)
De paso, si te gustan los limes dibujísticos, date una vuelta por mi blog.
Saludos!
(creo que esto quedo demasiado largo para un comment, no? :P)
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