27 de junio de 2010

si yo fuera

no me importa sonar demagógica. amo a maradona, pero lo amo desde hace mucho tiempo ya, desde antes del mundial.
lo amo. porque es el héroe argentino. cuando en un programa de tv, salió elegido san martín como el personaje argentino del bicentenario, me indigné. el diego es la argentinidad por antonomasia. no me jodan, el general era muy heroico: liberó países hermanos, y murió en la pobreza y la miseria. eso no es ser argentino. maradona es LA argentina: creció en la pobreza, se construyó como ser humano y sufrió miles de caídas. se levantó, y estamos vivos para contarlo. por eso lo amo: porque no es impoluto, ni inmaculado. ni pretende serlo. también lo adoro porque veo quiénes lo odian.
el fútbol no es santo de mi devoción, pero esos noventa minutos en los cuales no hay leyes, y no sirven ni el azar, ni la fortuna, ni el talento... valen la pena esperarlos, aunque sea cada cuatro años.
viva el mundial, y a los pseudo intelectuales que odian el fútbol y se muestran indiferentes: que la sigan chupando

6 comentarios:

agustín dijo...

qué placer que maradona se dedique al fútbol. si fuera político, sentiría mucho miedo al verlo callar de esa manera a los que opinan distinto a él. hasta en eso es bien argentino.

Damian! dijo...

QUE BUENA ONDA LOLA!!! NUNCA MEJOR DICHO!!!

Un beso!

Jony G. dijo...

Amo el fútbol pero el mundial no lo vivo ni con el 1% de pasión con el que vivo las competiciones locales...
No sé por que será.
Y sobre Maradona, no me provoca nada. No tuve la suerte de verlo jugar, sólo espero que le vaya bien porque me parece que le transmite algo especial al grupo de la selección argentina, algo que nunca vi en otro técnico que la haya dirigido.

Lucas Fulgi dijo...

Jajajaja. Genial. ¡Una explicación totalmente coherente y meditada!

Diegoooooo, Diegooooo.

Agustín dijo...

Yo estoy deacuerdo en todo menos en eso de San Martín... San Martín pudo haber representado algo parangonable con la argetinidad en aquella época... el tema es que creer que era impoluto, perfecto y que no tuvo que lidiar con ninguna problema es errado. Diego y San Martín tienen en común eso de ser seres humanos. Yo no cometería la estupides de elegir al mejor porque sería siempre estar negando una parte de lo que somos... y somos tanto de San Martín como de Maradona (entre tantos otros). La heroquización de San Martín es un problema de los libros de texto y la vulgarización de Diego es un problema de la etiqueta y los medios, pero ninguna de ambas es real.

Cami dijo...

juntarte a charlar con ailu tenes (igual te digo, seguramente ya sabrás, su santuario es su facebook jeje)