6 de abril de 2009

cartas sin marcar

hace unas semanas, acudí a una "tarotista", principalmente por curiosidad. me dijo un par de cosas interesantes, predijo una serie de hechos que pueden ser considerados como supersticiones o simples casualidades de la vida por los más pragmáticos (no pienso refutarlos, probablemente estén en lo cierto), algunas de sus predicciones las eliminé de mi mente y otras, las tuve en cuenta. pensé que si modificaba algunas actitudes marcadas por el "oráculo", llegaría a ese objetivo tan feliz que, certeramente o no, ella me lo había predicho. me llegué a replantear ciertas cuestiones sólo porque me lo decía una persona que "adivina el futuro" tirando cartas.
me considero bastante racional en este tipo de cosas: no creo en fantasmas, espíritus ni cosutmbres supersticiosas, aunque la única que cumplo es la de no pasar abajo de una escalera, pero porque me da miedo que se me caiga la escalera en la cabeza.
sólo quiero destacar lo aferrado que uno puede llegar a estar a algo antes desechado, sólo porque uno necesita creer. sí, necesito creer que va a pasar eso o va a dejar de pasar aquello, entonces, de repente, le hago caso a una desconocida que afirma saber lo que (me) pasará.
me parece raro, no lo niego, me sorprendí a mi misma, pero creo que forma parte de una de las tantas formas de mantenerse atado a lo que uno conscientemente, quiere alejarse, pero, inconscientemente, no.

No hay comentarios.: